Ártica editorial, 2012.
207 páginas.
19,50 €.
De Edvard Munch
(1863-1944) conocía su origen nórdico y sus cuadros más famosos –El grito, cuya fama se
incrementa con cada uno de sus espectaculares robos- Muchachas en el puente o Melancolía,
entre otros, todos ellos caracterizados por la potencia extrema de sus colores
–rojos, amarillos verdes-, la pincelada segura y vigorosa, y el misterio, la
rabia, la desolación, que intuyes que hay detrás. Son cuadros
inquietantes, transmiten angustia, rebeldía y una enorme personalidad del
autor. Fuensanta Niñirola ha tenido el acierto de proporcionarnos claves para
que cada cual pueda desentrañar sus fantasmas privados. Conocer
la atmósfera en la que vivió, los problemas familiares y existenciales, sus
sentimientos amorosos, sus decepciones, sus terrores, sus creencias políticas y
morales, provoca unas ganas enormes de volver a su obra y contemplarla con una
nueva mirada enriquecida por ese conocimiento.
La estructura
del libro sigue pautas académicas. Una primera parte de 50 páginas
para contextualizar a Munch en su época y determinar el lugar que ocupa como
heredero de la pintura naturalista nórdica y romántica alemana y seguidor de
las líneas simbolistas y expresionista del postimpresionismo francés. Con estos
nutrientes creó su inconfundible estilo. El resto, la segunda parte, está
dedicada a su vida y obra que son indisolubles en el artista.
Una vida marcada
por un entorno dominado por la enfermedad, la muerte –huérfano de
madre a los cinco años; su hermana Sophie muere a los quince de tuberculosis
produciéndole una feroz impresión- y el miedo a la demencia (convencido
de haber nacido con la semilla de la locura). En el caso de Munch fue la
causa para renunciar al matrimonio y tener hijos, lo que da una idea de la
influencia que tuvo en su existencia. Con estos datos, cobra nuevo significado
cuadros como “La niña enferma” que pintó con 22 años, su primer gran cuadro,
inspirado en la muerte de su hermana –predominan los tonos verduscos y negros
con la única iluminación de la almohada blanca que suaviza el rostro de Sophie-
y con el que marca su territorio: la pintura como medio de comunicación de
sentimientos íntimos, obsesiones y terrores. El arte nace de la alegría y el dolor. Crece a partir de la vida
humana. Arte es la descripción de esta vida, de su movimiento, escribió en
1905. No fue un hombre afortunado en el amor, a pesar de ser apuesto,
inteligente, elegante y, con el tiempo, rico. Dos mujeres –Milly, mayor que él y casada que acabará abandonándole, y Tulla, una pasión
destructiva con un final trágico y doloroso- tienen una presencia importante y
simbólica en su obra. Niñirola explica cómo la asociación de sexo y muerte
domina la visión erótica de Munch así como la creencia de una lucha sorda entre
el hombre y la mujer por ejercer el dominio.
Munch viajó
mucho, recaló en bastantes ocasiones en París, residió en Berlín, conocía los
movimientos pictóricos de su época, y las técnicas gráficas que
cultivó, se mostró permeable a estas influencias a las que incorporó su propio valor
añadido.
El libro
intercala reproducciones en color de los principales cuadros que nos comenta y
en unas páginas en sepia, explicaciones oportunas sobre el simbolismo, el
modernismo y sezession, el impresionismo, el grabado y sus técnicas, su
relación con el escritor sueco Strindberg (confluyen en su interés por la
irracionalidad humana), el expresionismo, una serie de opiniones de Munch sobre
el arte extraídas de sus diarios, y su relación con la fotografía. Son apuntes,
claros y concisos que ayudan al lector a no perderse.
Cuando cayó en
mis manos este libro lo ojeé con cierta curiosidad (el cuadro de la portada es
magnético). De la misma forma, algo indolente, me aventuré a leer sus primeras
páginas. No lo pude dejar. La personalidad de Munch, su obra y su vida me
atrajeron con fuerza. Mucho tenía que ver la forma en que nos llega, a través
de las palabras de Niñirola, que con un lenguaje sencillo y culto nos enreda
con un ensayo trabajado lleno de fantasía.
Reseña publicada en POSDATA, el suplemento cultural de LEVANTE-EMV, el viernes 15 de febrero de 2013.
Reseña publicada en POSDATA, el suplemento cultural de LEVANTE-EMV, el viernes 15 de febrero de 2013.