Editada por Seix Barral (2009) y Círculo de Lectores (2010)
Traducida del euskera por Ana Arregi.
191 páginas.
Premio Nacional de Narrativa 2008.
El autor explica las pretensiones de este libro: "hablar de tres generaciones distintas de una familia, sin volver a la novela del siglo XIX" (pág. 128). La familia es la suya, asentada en Ondarroa. Ése "sin volver a la novela del XIX" significa que la metodología se concreta en la narración fragmentaria de pequeñas historias de individuos de cada generación. El autor ha escogido a su abuelo, su padre y su madre.
Tal vez aquí se encuentra la mayor debilidad del texto, pues la novela del siglo XIX, excelente cosecha, por cierto, se caracteriza por una estructura sólida, análisis sicológico de personajes, un argumento con inicio, desarrollo y desenlace, en fin, lo que se entiende por una novela.
"Bilbao-New York-Bilbao" es un texto que tiene mucho de anecdotario de los personajes mencionados y recopilación de hechos y leyendas, algunas muy hermosas, sobre el mundo marinero y rural de la sociedad vasca. Pero el hilo argumental, el viaje en avión desde Bilbao a New York resulta endeble, las observaciones realistas sobre el aeropuerto, el avión, etc. innecesarias, y la reproducción sistemática de la información recogida en pantalla sobre latitud y longitud y otras variables de los sitios por los que va pasando el avión, artificiosa.
A pesar de ello, o quizás gracias a su innovadora estructura, el texto se mantiene, respira sinceridad, amor a su familia y a la tierra, la lengua y la cultura vasca y consigue que el lector lo comparta. Algunas páginas son emotivas y aporta reflexiones atinadas y siempre originales. Es ameno y se lee con gusto, pero no está justificado, en mi opinión, el Premio Nacional de Narrativa 2008.
Traducida del euskera por Ana Arregi.
191 páginas.
Premio Nacional de Narrativa 2008.
El autor explica las pretensiones de este libro: "hablar de tres generaciones distintas de una familia, sin volver a la novela del siglo XIX" (pág. 128). La familia es la suya, asentada en Ondarroa. Ése "sin volver a la novela del XIX" significa que la metodología se concreta en la narración fragmentaria de pequeñas historias de individuos de cada generación. El autor ha escogido a su abuelo, su padre y su madre.
Tal vez aquí se encuentra la mayor debilidad del texto, pues la novela del siglo XIX, excelente cosecha, por cierto, se caracteriza por una estructura sólida, análisis sicológico de personajes, un argumento con inicio, desarrollo y desenlace, en fin, lo que se entiende por una novela.
"Bilbao-New York-Bilbao" es un texto que tiene mucho de anecdotario de los personajes mencionados y recopilación de hechos y leyendas, algunas muy hermosas, sobre el mundo marinero y rural de la sociedad vasca. Pero el hilo argumental, el viaje en avión desde Bilbao a New York resulta endeble, las observaciones realistas sobre el aeropuerto, el avión, etc. innecesarias, y la reproducción sistemática de la información recogida en pantalla sobre latitud y longitud y otras variables de los sitios por los que va pasando el avión, artificiosa.
A pesar de ello, o quizás gracias a su innovadora estructura, el texto se mantiene, respira sinceridad, amor a su familia y a la tierra, la lengua y la cultura vasca y consigue que el lector lo comparta. Algunas páginas son emotivas y aporta reflexiones atinadas y siempre originales. Es ameno y se lee con gusto, pero no está justificado, en mi opinión, el Premio Nacional de Narrativa 2008.
Pa mi gusto, no cumplió con las expectativas que se le presumen a tan galardonada novela,
ResponderEliminarUn saludo.